jueves, 22 de abril de 2010

Las nuevas tecnologías revolucionan el lenguaje empresarial

Los cambios asociados a la creciente extensión de la sociedad de la información también se han hecho notar en el lenguaje. Por influencia de los teléfonos móviles, de los chat o de los e-mail, cada vez más personas sintetizan sus mensajes en unas pocas letras, para muchos sin sentido. En el mundo de los negocios también es frecuente a la hora de relacionarse con el entorno más próximo.

«Ns rnms dps d kmr». A través de este comunicado, ficticio e ininteligible, la dirección de una empresa avisa por e-mail a sus empleados de que tras la comida van a tener una reunión. El teclado no se ha estropeado, no hay un virus en el sistema y el jefe no habla en un idioma desconocido para el resto. ¿Cómo es posible entonces que alguien escriba algo así? La solución, en las TIC. Es la forma de comunicación que se ha desarrollado al amparo de las tecnologías, en especial de los teléfonos móviles y de Internet.

Se trata de un lenguaje sintético, plagado de acrónimos, traslaciones fonéticas de letras y, cómo no, de errores ortográficos. En él, los signos de puntuación brillan por su ausencia, las vocales desaparecen y las tildes y las normas estilísticas son condenadas al olvido. Una jerga que ya no es sólo cosa de adolescentes; hasta los ejecutivos más respetables se han dejado contagiar.

Los documentos oficiales, los informes de ventas, los presupuestos, las notificaciones a los clientes, la página web corporativa o la publicidad, es decir, los asuntos más serios e importantes, no se han visto afectados por la moda de las abreviaturas. En caso contrario la credibilidad de las firmas quedaría en entredicho... ¿o no? Existen casos en los que, de manera intencionada, estos textos se asemejan a los SMS para aportar frescura o conectar mejor con lo que se lleva.

No obstante, es en las comunicaciones más informales donde este lenguaje se explaya a sus anchas. Los e-mail internos, la mensajería instantánea, los blogs no institucionales o los foros de empresa son caldo de cultivo para que las "k" canibalicen a las "c", para que las mayúsculas se jubilen, para que las palabras sean sustituidas por emoticonos.

La nueva tendencia disortográfica puede resultar
peligrosa si no se sabe controlar a tiempo. No puede convertirse en la tónica dominante de los escritos de negocios, salvo excepciones de tipo estratégico. Es fundamental no perder de vista que la expresión también influye en la excelencia.

miércoles, 21 de abril de 2010

Canales RSS, vitales para generar tráfico web

Sindicación realmente simple. Ésa es la traducción que se ha hecho de las siglas RSS, una herramienta online que permite a los internautas suscribirse a los contenidos que les interesen de una determinada web y recibir en su ordenador información permanente actualizada sobre los mismos. De este modo la empresa, además de ganarse la confianza de los usuarios de la Red, tiene la oportunidad de transformarles en clientes y de incrementar el número de visitas a su página.


Los canales RSS han revolucionado los negocios online. Previa suscripción, permiten suministrar contenidos siempre que un espacio de Internet se pone al día. Ofertas, productos insólitos, concursos, artículos de opinión... Todo lo que se suba a las www y que resulte de interés para el receptor llega a su e-mail o software específico de lectura en forma de titular+resumen+link. El objetivo es despertar su curiosidad para que dé un nuevo paseo por la página de la empresa.

Disponer de un sistema RSS no es la panacea para incrementar el
tráfico de visitas a un portal virtual y, por ende, la lista de potenciales clientes. De poco sirve estar capacitado para distribuir contenidos por esta vía si los usuarios no están informados al respecto. Como en todas las estrategias de empresa, será necesario echar mano de las técnicas de promoción que brinda el marketing; en este caso interesan las de la vertiente online.

Además de en la propia página, conviene dar cuenta de la existencia de la herramienta de sindicación en todas las comunicaciones que lleve a cabo la compañía. Los correos electrónicos, los boletines de noticias o los mensajes en las redes sociales deben contener iconos y enlaces a los canales de suscripción. Los expertos recomiendan, asimismo, darse de alta en directorios especializados en este tipo de canales. Cuanta más gente sepa de su existencia, más fácil será aumentar la cifra de abonados.

Aunque el uso de estas herramientas está cada vez más extendido y la mayoría de la gente conoce su funcionamiento, el empresario no puede dar esta realidad por sentado. Por eso conviene dedicar un apartado específico en la web a explicar, brevemente, su modo de operar, así como las ventajas que se derivan de su uso.

Para quienes ya estén enterados no será ningún descubrimiento, pero para los que se acercan por primera vez resultará esencial. Sentirse atendido y comprendido desde el primer momento es una de las claves de todo negocio que tampoco puede obviarse cuando se opera en el entorno online.